La detección de la demanda es un enfoque estratégico que permite a las empresas adaptar de forma proactiva y receptiva sus cadenas de suministro a la demanda fluctuante. Esta práctica innovadora no sólo mejora la agilidad de la cadena de suministro, sino que también tiene el potencial de aumentar los ingresos de una empresa.
Al integrar la detección de la demanda en el sistema de gestión de almacenes de una empresa y otros sistemas de la cadena de suministro, se pueden recopilar de manera eficiente datos en tiempo real de todas las operaciones, disciplinas, vendedores y proveedores que respaldan la detección de la demanda. Esto permite un reabastecimiento de productos rápido y preciso, asegurando niveles óptimos de inventario y minimizando las interrupciones.
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